Orisha Agayu Sola

Agayú Solá

 

Simboliza la política, la tierra, los lugares elevados, las montañas, las cimas, los lugares aislados e inaccesibles, las luchas, los obstáculos e impedimentos, la mala suerte, los reveses de fortuna, las carreras brillantes, la decadencia, el tiempo, la noche, los viejos, las deformaciones, el invierno, el frío, las minas, el deber social, las ambiciones profesionales.

Son ambiciosos, decididos, cuidadosos, lideres, prudentes, perseverantes, serios, concentrados, responsables, metódicos, tradicionistas, con gran sentido de la individualidad, realistas, organizados, ordenados y pragmáticos. Mentirosos, arribistas, pesimistas, fatalistas, melancólicos, reprimidos, tímidos, obstinados, utilitaristas, rencorosos, de carácter frío y reservado, faltos de detalle, tacaños, mezquinos, aguafiestas, exagerada importancia al éxito social, de principios rígidos, egoístas y dominantes.

Es un Orisha mayor. Es el padre de Shango, el gigante de la Osha, (según algunas fuentes, pues en otras fuentes es su hermano). El orisha de la tierra seca, deidad del desierto. Patrón de los caminantes y porteadores. También de los automovilistas y aviadores, estibadores. Es el Patrón de la Ciudad de la Habana.

Las fuerzas terrenales, que le pertenecen, son símbolo de sus tremendas energías, como la potencia de los ríos que dividen los territorios, la de la lava que perfora la corteza terrestre, la de los terremotos que la conmueven y la del impulso que la hace girar eternamente. Es el Báculo de Obatalá. Oroiña es su madre. Su temperamento es belicoso y colérico. El protege a los cargadores y conductores de vehículos (chóferes).

Su refugio es la palma, sobre todo cuando se encuentra en alguna situación difícil. Es amigo de cargar a los niños y ponérselos sobre los hombros. Se le reconoce por sus largos pasos y porque alza mucho las piernas al andar. No puede ir a la cabeza de nadie. Sus días son el Miércoles y el 16 de cada mes. Su número es el 9.

Su receptáculo es un lebrillo de madera, o de barro, decorado con sus nueve colores. Cuando se asienta lleva nueve herramientas que acompañan a la piedra o fundamento, en forma piramidal u otra que sugiere una elevación terrestre.

Los atributos son:

Oché (hacha bipene roja y blanca, adornada con abalorios amarillos, rojos y azules).

Oggué (dos cuernos de novillo)

16 mates (semillas redondeadas que se encuentran a la orilla del mar).

Las herramientas son el hacha bipene y bastón. Cuando es de fundamento, se le suman las seis herramientas de Chango.

Los collares son en La Habana de color cacao, matipó, perla, azul turquesa, una roja y, a veces, una amarilla o verde. En otras casas de santo las cuentas son de color cacao alternadas matipó, insertándosele cada nueve cuentas, otras rojas, azul, turquesa, verdes y amarillas. También una cuenta blanca grande, seguida por nueve rojas y ocho amarillas, orden que se repite varias veces.

Los pantalones y chaquetillas de color rojo oscuro. De su cintura penden pañuelos o tiras de diversos colores.

Las comidas son nueve galletas untadas de color rojo oscuro. De su cintura penden pañuelos o tiras de diversos colores.

Los animales son el toro, chivo, gallo, paloma y guinea.

Los bailes de este orisha son conocidos por sus pasos largos y porque alza mucho los pies, como para salvar obstáculos. Carga a los niños que están a su alcance y se los pone sobre los hombros.

Castigos y protecciones.

Presión sanguínea y calenturas. También accidentes automovilísticos.